Naming. Traducción. Fonética. Lectura. Ortografía. Son cuestiones que van de la mano en el momento de establecer un nombre para nuestra marca.
¿Qué debemos tener en cuenta respecto a naming, traducción e idiomas? En este post te enumeramos una serie de cuestiones que te resultarán útiles si tu marca va a estar presente en lugares donde se hablan distintos idiomas.
DESCARGA EL EBOOK: BRANDING DIGITAL, MÁS BRANDING QUE NUNCA
Naming: traducción directa con nombre único
Si tu marca va a estar presente en varios países donde se hablan idiomas diferentes, es conveniente que compruebes las posibles traducciones que puede tener cualquier nombre que pienses para ella.
Supongamos que quieres nombrar “coach” a tu marca de ropa para deporte. Quieres que esté presente en España, EEUU y Hungría. Vamos a ver cómo podría ser interpretado por los habitantes de dichos países:
- El idioma oficial de España es el español y la palabra “coach” en este idioma no significa nada, por lo que, a priori, no habría ningún problema con ella.
- El idioma mayoritario de EEUU es el inglés y la palabra “coach” significa “entrenador”. Teniendo en cuenta que buscamos un nombre para una marca de ropa para deporte, el naming y el sector son coherentes entre sí.
- El idioma oficial de Hungría es el húngaro y la palabra “coach” en este idioma significa “coche”. Quizá aquí tengamos un problema con la traducción. ¿Queremos que nuestra marca de ropa se relacione en este país con el sector de la automoción? Esta pregunta debemos responderla antes de tomar una decisión acerca del naming.
Por lo tanto, si vamos a distribuir nuestra marca en diferentes países, debemos hacer un listado de todos los países en los que tu marca va a estar presente y de sus correspondientes idiomas, y a continuación comprobar las posibles traducciones que el nombre elegido tiene en dichos idiomas. Si alguno de ellos conlleva una traducción que puede dar lugar a incoherencias o malentendidos, lo recomendable es elegir otro.
Aunque existe otra posible estrategia relativa a naming, traducción e idiomas. Veámosla.
Naming: traducción en otros aspectos
Otros aspectos que debes tener en cuenta a la hora de trabajar el naming para tu marca si esta va a estar presente en distintos idiomas son:
- Aspectos ortográficos. Si eliges un nombre que no signifique nada en ningún idioma, debes procurar que ese naming no puede ser interpretado con faltas de ortografía por los hablantes de un idioma determinado. Tú hablas español, así que imagina lo que pensarías si te encuentras con una marca, sea del sector que sea, que se llama “llendo”. Peor aún si la marca gira en torno al sector del turismo.
- Aspectos relacionados con la lectura. Debes cuidar que el nombre de tu marca pueda leerse sin problema en cualquier idioma en los que va a estar presente. Si en alguno de ellos hay grupos consonánticos o letras de difícil lectura o pronunciación, lo mejor es que los evites para que no haya conflictos en la pronunciación del nombre de tu marca.
Como has comprobado, de las cuestiones relativas a naming, traducción e idiomas pueden derivarse distintos problemas a los que deberás estar atento. De modo que la clave esencial no es ponerte solo en el lugar de tu comprador, sino también en su forma de procesar su idioma.