Reconocimiento, distinción, motivación, atracción y confianza. Estos son los 5 elementos imprescindibles en un buen naming de marcas deportivas. Se trata del elemento principal al que los consumidores asociarán la identidad corporativa de la compañía. Un premeditado y sonoro conjunto de letras y palabras que sintetiza los valores, cualidades y personalidad de la empresa.
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¿Por qué se llaman así las marcas deportivas?
Los nombres de marcas deportivas deben ser breves, concisos y enérgicos. Se trata de un naming creado para establecerse en un mercado altamente globalizado y competitivo. Ahora bien, ¿cuál es la tendencia en la creación de nombres para marcas deportivas que siguen la mayoría de las compañías más populares?
Un estudio sobre los los nombres de marcas deportivas publicado en la revista especializada en ciencia del deporte Ricyde, muestra como el 70% de 239 marcas deportivas analizadas, utilizan un nombre con significado real. El 28% es interpretable y tan sólo el 1,5% de los nombres no tiene ningún significado. “Siempre hay una razón, semántica, fonética o asociada a un lugar o un personaje real o mitológico, como Nike, por la diosa griega de la victoria”, explica Jorge Muñoz, autor del estudio.
- Nombres propios: la marca deportiva Converse hace alusión directa al apellido de su creador, Marquis M. Converse; del mismo modo que lo hace Dunlop (fundada por John B. Dunlop), o las marcas deportivas creadas por tenistas; Fred Perry (Frederick J. Perry) y (Jean René) Lacoste.
- Reminiscencia histórica/mitológica: la cultura de cualquier pueblo siempre ha sido una gran fuente de inspiración para políticos, escritores, historiadores y, por qué no, especialistas en naming. Por ejemplo, la marca Nike es el nombre de la diosa griega de la victoria, Asics son las siglas del latinismo Anima sana in corpore sano, y Kappa, es la décima letra del alfabeto griego.
- Apodos: La separación de la empresa familiar de los hermanos Dassler dio lugar a la creación de Adidas y Puma. Ambos nombres, son apodos del nombre de sus fundadores Adolf Dassler (conocido como Adi) y Rudolf (conocido en su juventud como ‘Puma’). Del mismo modo que Umbro es un juego de palabras con la abreviación del apellido de sus fundadores, los hermanos (bro) Humphreys y Joma es el apodo de su creador, José Manuel.
- Símiles con un animal: es evidente que los animales ágiles y veloces son un gran referente creativo en el proceso de creación del naming de una marca deportiva. Y es por ello que Reebok, es la adaptación del nombre de una gacela africana.
La conclusión del estudio es: “Siempre hay una razón semántica, fonética asociada a un personaje” en el proceso del naming deportivo.
¿Podemos hablar de tendencias en naming deportivo?
De un análisis objetivo, como hace ese estudio, efectivamente podríamos deducir que se da una tendencia clara. Sin embargo, desde un análisis cualitativo deberíamos preguntarnos ¿es la conclusión del estudio una circunstancia intencionada y relacionada directamente con este ámbito empresarial? La verdad es que no.
Esa conclusión poco nos dice sobre tendencias en el naming del ámbito deportivo, y poco orienta de cara a nuevos procesos.
La mayoría de los nombres en cualquier ámbito del naming buscan una razón de ser semántica que los legitime. El naming es una disciplina compleja, especialmente por temas de riesgos jurídicos y lingüísticos, pero también lo es creativamente porque a todos nos gustaría que nuestro nombre lanzara un mensaje que nos ayude a comunicar cosas positivas sobre nuestra marca.
- Ninguno de los nombres que se derivan de apellidos o apodos en el estudio tienen realmente algo que aportar a la marca, simplemente tienen una justificación. Si el fundador se hubiera llamado de otra forma, la marca se llamaría de otra forma, o si la marca hubiera tenido otra personalidad o propósito, el nombre no hubiera cambiado. Eso demuestra que no hay nada meditado ni estratégico en esos nombres.
- No es el caso de los nombres como Asics, que evidentemente ayudan a la marca en su discurso (siempre y cuando lo comuniquen, si no se queda en algo abstracto que nadie entiende aunque ese sea su origen).
Muy a menudo, el nombre es el primer contacto que establece el cliente con la marca. Al final lo importante es la primera impresión y capacidad de ese nombre de asociarse a ciertos territorios de significación. En el ámbito deportivo deberán ser, por tanto, nombres sonoros, que transmitan fuerza, por tanto cortos, ágiles, con letras sinuosas, deslizantes o cortantes como un golpe, patada…
O no. Contar con un buen nombre favorecerá la posición de la marca en el mercado de las marcas deportiva, ya sea especializada en ropa, calzado o complementos. Es por ello que es muy importante que sea capaz de atraer su atención de la manera especial, más creativa y original posible.
Además de crear un nombre perdurable en el tiempo.